La pasada semana, llegaron las primeras lluvias otoñales, y con ellas, los que nos temíamos los vecinos de Nervión. Las obras del nuevo carril bici en la Avenida Cruz del Campo, hablan por si mismas. El considerable nivel de inclinación que tenía la primitiva acera, no ha sido corregido, por lo que la previsible acumulación de aguas no se hizo esperar , siendo más ostensible en la acera de los impares que en ésta de los pares.
Luego vendrán, a hablarnos de las bondades del transporte alternativo, la movilidad, y las fotos de la inauguración, lo que desconocemos es si nos entregarán a los residentes, un par de botas de agua, por aquello de utilizar el coche de San Fernando...
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